Este sábado, en el marco de las ferias de septiembre de Benavente, se llevó a cabo un taller de elaboración de pan que cautivó a los más pequeños. Organizada por la panadería Robles de Manganeses, la actividad arrancó a las seis de la tarde.
Descubriendo el arte del pan
El taller comenzó con una introducción al mundo de la panadería. Los niños, con gorros blancos y pelo recogido, se sentaron expectantes mientras la panadera les enseñaba cómo se elabora la masa desde cero. Las diapositivas mostraron el proceso completo, desde los ingredientes hasta el horneado, ofreciendo a los pequeños una visión detallada de cómo se hace el pan en la panadería Robles.
¡La diversión comienza con la masa!
Una vez que la teoría se dejó atrás, la acción realmente comenzó cuando los niños se lanzaron a jugar con la masa. La carpa se llenó de risas contagiosas y una auténtica tormenta de harina mientras los pequeños manipulaban la masa con entusiasmo. La harina volaba por el aire, cubriendo las mesas, los gorros y, a veces, hasta los rostros de los niños, creando un ambiente lleno de creatividad.
Algunos niños usaban moldes de diversas formas para crear pequeñas figuras y formas divertidas, mientras otros se deleitaban simplemente sintiendo la textura de la masa entre sus manos. La masa, a veces pegajosa y a veces suave, se convirtió en un lienzo en blanco para la imaginación de los pequeños. Los que se sentían más aventureros intentaron hacer panes con formas especiales, mientras que otros formaban bolitas de masa. Las carcajadas eran constantes mientras los niños competían para ver quién podía hacer el pan más original o el más grande.
Un final dulce y familiar
Los padres también tuvieron su momento para participar, ayudando a sus hijos a decorar sus creaciones y asegurándose de que todos disfrutaran de la actividad. El taller de pan de la panadería Robles en Benavente no solo ofreció una lección sobre el arte de la panadería, sino que también brindó una experiencia divertida y educativa para todos los participantes.
