En la localidad de Castrogonzalo se ha querido volver a las raíces recreando los oficios tradicionales como el de la siega, el acarreo y la trilla. No se hizo a mano, con la hoz, sino con las primeras máquinas arrastradas por caballerías. Unas faenas agrícolas que sellaron, hace décadas, toda una época en este término con una gran superficie de cultivos cerealistas.
La actividad organizada desde el Ayuntamiento pretende concienciar entre los más pequeños y jóvenes las duras faenas agrícolas, a la par de dar a conocerla en un afán intergeneracional.