Un centro de fisioterapia de Zamora es el primero de Castilla y León que, desde hoy 8 de septiembre Día Mundial de la Fisioterapia, ilumina su fachada con el nuevo símbolo que identifica a estos titulados frente al intrusismo que sufre esta profesión.
Zamora ha sido una de las ciudades elegidas por el Consejo General de Colegios de Fisioterapeutas de España (CGCFE) en esta conmemoración para la puesta en marcha es una iniciativa pionera que espera pueda convertirse en una referencia para estos profesionales titulados frente al intrusismo que sufren en su actividad diaria.
En la jornada de hoy se encienden las primeras cruces blancas con bordes fucsias que, a partir de ahora, identificarán a los centros y clínicas de fisioterapia de profesionales titulados. Este símbolo lucirá a la entrada de estos establecimientos y servirá a los pacientes para diferenciarlos de otros locales que parecen ofrecer los mismos servicios, pero ponen en riesgo su salud.
El Consejo General de Fisioterapeutas elige esta jornada para la puesta de largo del Proyecto iKono, creado para dar visibilidad y poner en valor la labor de los más de 66.000 fisioterapeutas titulados que hay en España, quienes podrán ser reconocidos a través de una cruz blanca y fucsia que lucirá a la entrada de sus centros y clínicas.
«El proyecto iKono nace como un símbolo que busca la unidad de la profesión y representa la calidad de un servicio de fisioterapia. Pero sobre todo, un símbolo que nos diferencia y que nos identifica frente a aquellos pseudoprofesionales que realmente están haciendo daño a nuestra población», explica el presidente del CGCFE, Gustavo Paseiro Ares.
La cruz blanca servirá de distintivo para que los pacientes tengan la seguridad de que serán atendidos por fisioterapeutas colegiados que van a proteger su salud.
MÁS DE 3.300 PROFESIONALES EN CYL
«Es una seña de identidad avalada por certificaciones que deben de tener los centros para avalar este trabajo sanitario que desde el punto de vista de garantías de la salud para el ciudadano debe de ir amparado por una normativa muy exigente», afirma David Rivera Herrero, tesorero del Consejo General y del Consejo de Fisioterapeutas de Castilla y León.
La Comunidad castellanoleonesa cuenta con un colectivo de 3.310 colegiados que, a partir de este momento, disponen de una imagen única de referencia para los pacientes sobre sus cualidades profesionales frente a cualquier posible intrusismo en su actividad, ahora avalada con un elemento externo que ratifica de su formación específica y cualificada.
El Consejo General de Colegios de Fisioterapeutas resalta que se trata de una nueva oportunidad para transmitir y concienciar a la sociedad en su conjunto sobre la contribución crucial que el trabajo de los fisioterapeutas lleva a cabo sobre la salud de las personas. El presidente puntualiza: «Lo que estamos buscando es la protección social y la visibilidad de la profesión, tanto a nivel público como de nuestros pacientes».
Experiencia, profesionalidad, responsabilidad, atención y calidad de los servicios son los valores que rigen la actividad de estos profesionales. Valores que el proyecto iKono ha englobado en una cruz blanca y fucsia, un símbolo que busca en primer lugar la identificación de un profesional y, al mismo tiempo, marcar de una forma clara la diferencia entre la actividad y la oferta de servicios de un fisioterapeuta frente a otros colectivos que dañan la imagen del sector y perjudican al paciente.
Este 8 de septiembre encienden sus cruces los primeros centros con este símbolo en su fachada. A ellos se sumarán en breve numerosas clínicas que han solicitado su distintivo a través de la página web oficial de la iniciativa.