Zamora capital fue durante la tarde de ayer el escenario de un hecho un tanto inusual. Tres jóvenes se adentraban en la iglesia de San Torcuato y una vez en el interior, se ponían a tirar piedras para después salir corriendo.
Por estos hechos se daba el aviso a la Policía Nacional que, poco después, daba con los autores de estos insólitos actos en la Plaza de Fernández Duro.
En el lugar, los agentes procedían a identificar a los tres jóvenes y tras esto uno de ellos era conducido a la Comisaría de la Policía Nacional.
El párroco de San Torcuato no quiso interponer una denuncia por estos hechos por lo que la situación no ha tenido mayor trascendencia y poco después los familiares del joven que había sido llevado a dependencias policiales fueron a recogerlo.