El conjunto de bienes que conforman el legado de Baltasar Lobo Casquero a la ciudad de Zamora ha sido incoado como Bien de Interés Cultural, tal y como recoge hoy el Boletín Oficial de Castilla y León. Este conjunto de bienes del escultor nacido en Cerecinos de Campos representan el testimonio material e inmaterial del artista, símbolo de un periodo de la historia de España con un alto significado para la cultura de Castilla y León, que es necesario preservar para generaciones futuras. Su declaración BIC como colección de bienes muebles, protege y garantiza la unidad del legado.
Desde 2003, la Fundación Baltasar Lobo, formada actualmente por el Ayuntamiento de Zamora y su familia, ha jugado un papel esencial en la gestión del legado así como en la promoción y divulgación de la obra del artista, abordando la instalación museística de la Casa de los Gigantes (Museo de Baltasar Lobo desde 2008) y, recientemente, la confección de un inventario digital, base de la propuesta de declaración de la colección como Bien de Interés Cultural.
La obra del artista, Premio Oficial de las Artes y las Letras de Francia en 1981, Premio Nacional de Artes Plásticas en 1984 y Premio Castilla y León de las Artes en 1985, ha sido expuesta entre 1945 y 2018 en las principales salas nacionales e internacionales y se encuentra en la actualidad dispersa por distintas colecciones de museos y fundaciones de más de dieciséis países de Europa, Asia y América del Sur.
El legado de Baltasar Lobo, objeto de esta declaración, es excepcional, tanto por su singularidad e integridad como por su significado histórico y artístico, como referencia indiscutible para conocer su actividad artística, sus preferencias estéticas y las influencias que recibió.
Este conjunto lo integran fundamentalmente las obras de titularidad pública depositadas en el Museo de Zamora y en el Museo Baltasar Lobo, así como las herramientas, enseres y documentación procedentes del taller del artista en París. Asimismo, se integra en la declaración la obra ubicada en la ciudad de Zamora, en el Ayuntamiento, en el Castillo, en la plaza de Zorrilla y en el parque León Felipe, incluyendo la obra que se encuentra en las Cortes de Castilla y León, en depósito temporal.
De acuerdo con el inventario digital de la Fundación Baltasar Lobo, el legado está integrado por 872 obras artísticas, distribuidas entre 750 esculturas (182 piezas de bronce, 465 modelos de yeso, 15 piezas de arcilla, 65 piezas de mármol y 23 piezas de otra índole: moldes, peanas y piezas de alabastro, marfil y piedra) y 122 dibujos, repartidas espacialmente en los espacios antes descritos.
Además se integran en esta declaración un buen número de cajas con fragmentos de obras inacabadas o fragmentadas, herramientas del artista, o material pétreo sin trabajar, depositados tanto en el Museo de Zamora como en la Casa de los Gigantes.