El colegio San Vicente de Paúl ocupó la plaza Virgen de la Vega con un arco iris gigante así como con peticiones por parte de los alumnos del centro para cumplir durante todos los días del año tanto en el entorno de las clases como en la vida familiar.
Un manifiesto y bailes por parte de profesores y alumnos hicieron de este Día de la Paz una fecha especial en la que reclamar que se cumplan por pare de todos los valores fundamentales para, entre todos, hacer un mundo mejor y sin tanta violencia.
En el colegio San Vicente de Paul, conviven, toleran y niegan el bullying que sufren muchos de sus alumnos, me parece una hipocresía por su parte el hacer estos actos en defensa de la paz, la igualdad y tolerancia, cuando en el propio centro no lo ponen en práctica.
Repito, el bullying en ese centro es real y afecta a muchos alumnos.