En el 40 aniversario de la beatificación de San Lucas del Epíritu Santo, su pueblo natal, Carracedo de Vidriales, ha querido erigir un monumento en su honor. Y lo ha hecho en la plaza que lleva su nombre y en un día señalado, en el día de su fiesta.
La cofradía de San Lucas del Espíritu Santo organizó esta conmemoración tras la solemne misa celebrada en el exterior de la iglesia parroquial. Una celebración eucarística teniendo como marco la bella portada de este antiguo templo dedicado a San Miguel Arcángel.
Carracedo de Vidriales se vestía de fiesta este domingo y los preparativos se venían organizando desde el viernes con el Tríduo dedicado a San Lucas. La organización dispuso una ordenada distribución de los bancos en el exterior de la iglesia, así como se instaló un toldo para resguardar de los rayos de sol a feligreses y devotos. El grupo de música tradicional Son de los Valles se encargó de realzar una ceremonia impregnada de solemnidad. Nada estaba improvisado, hasta el mínimo detalle parecía estar supervisado de antemano con la perfecta disposición de los estandartes del santo, la imagen del copatrón, el ramo, el propio altar y de testigo el pendón de Carracedo. El párroco Miguel Hernández expresaba su agradecimiento a todos los actores partícipes de la celebración resaltando la unidad de un pueblo en la adversidad de esta pandemia que nos ha tocado vivir.
Y como suele ser habitual en este pueblo, el grupo musical Bañezaina ponía el tinte festivo a este domingo 22 de agosto de 2021 que pasará a formar parte de la intrahistoria de Carracedo de Vidriales.