
Monseñor Jesús Fernández González, ha presidido esta mañana la Misa Crismal en la Catedral de Astorga. Una ceremonia solemne que será la última que presida como prelado de la iglesia asturicense.
En la reunión del Colegio de Consultores celebrada el día 27 de marzo de 2025, con posterioridad a la comunicación oficial del traslado de monseñor Jesús Fernández González, obispo de Astorga, a la sede de Córdoba, el obispo, junto con el Colegio de Consultores, acordó convocar a todos los sacerdotes y fieles de la diócesis a una Misa de Acción de gracias a Dios por el tiempo que ha regido la diócesis asturicense.
Al tiempo que el prelado agradece las múltiples manifestaciones de cariño y gratitud recibidas en estos días desea cumplir con esta acción litúrgica lo que loablemente indica el Ceremonial de los Obispos cuando indica: “Es conveniente que el Obispo que ha sido promovido a otra sede, convoque a su pueblo a una acción litúrgica, para despedirse de él, y con él dar gracias a Dios por los beneficios recibidos durante el tiempo de su episcopado” (Ceremonial n. 1156).
Dicha celebración tendrá lugar el día 18 de mayo, domingo, a las 18 horas en la Catedral y a ella están invitados todos los sacerdotes y fieles de la Diócesis.
La celebración de la Misa Crismal, como viene siendo habitual, ha tenido lugar en la Catedral, este Miércoles Santo, l6 de abril, a las once de la mañana. A esa hora, ha comenzado la Eucaristía en la que, en torno al Obispo, vínculo de unidad de todo el pueblo Santo de Dios, se han congregado más de 80 sacerdotes junto con consagrados y laicos.
En el contexto eucarístico, ha tenido lugar la consagración del Santo Crisma y la bendición del óleo de los catecúmenos y de los enfermos. Por ser una fiesta eminentemente sacerdotal, los presbíteros también han renovado su consagración a Jesucristo y a su Iglesia, manifestando públicamente su determinación de seguir siendo fieles a la misión que el Señor les ha encargado de anunciar el Evangelio y curar a los heridos de este mundo.


