A las puertas el Ayuntamiento de Benavente, en el edificio de El Ferial, se concentró este mediodía un nutrido grupo de personas guardando un minuto de silencio en repulsa a la muerte de dos guardias civiles en acto de servicio, a consecuencia de ser arrollados por una narcolancha en Barbate (Cádiz).
La convocatoria efectuada por la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) y a la que se sumó el Ayuntamiento de Benavente servía, además, no solo como repulsa y condena, sino también como apoyo a la Guardia Civil ante los terribles acontecimientos en los que fallecieron dos agentes de la Guardia Civil. Al acto no asistieron los concejales del PSOE ni el de IU, a pesar de estar convocados por el Ayuntamiento.
Uno de los dos agentes de la Guardia Civil fallecidos, David Pérez Carracedo, era originario de la cercana localidad leonesa de Nogarejas de donde es natural su madre y a cuyo pueblo acudía con frecuencia. Sus restos mortales llegaban al atardecer de ayer domingo a Nogarejas donde este mediodía se ofician sus funerales y posterior entierro.