Desde el 16 de junio y hasta la fecha, son ya más de 64.000 hectáreas las arrasadas por las llamas en la provincia de Zamora. A ello se suman las pérdidas de dos vidas humanas, heridos, ganado, viviendas, instalaciones ganaderas y agrícolas, instalaciones apícolas, infraestructuras y maquinaria, y los innumerables sentimientos de impotencia, de rabia contenida y desconsuelo de miles de personas evacuadas de sus casas.
Una cifra que representa el 6,02% de la provincia, según aportan los fríos datos satelitales de Copernicus, que no dejan lugar a dudas y son más que reveladores.
En el incendio forestal de la Sierra de la Culebra se llegaron a quemar un total de 27.000 hectáreas, en el de Losacio otras 31.000 hectáreas. Otros incendios forestales no de menor importancia han dejado tras de sí una buena superficie arrasada por el fuego como las 2.000 hectáreas del incendio en Villaseco del Pan o las 1.176 hectáreas en Figueruela de Arriba, otras 1.587 hectáreas en el incendio de Losacino y las 826 hectáreas arrasadas por las llamas en el incendio forestal de Roelos. A ello se tendrían que sumar las más de 400 hectáreas del incendio forestal en el término de Ayoó de Vidriales.