La temporada de gripe ha alcanzado su punto álgido en Castilla y León con cifras alarmantes: el 40% de los mayores de 60 años y el 60% de los niños menores de cinco años siguen sin vacunar. Esta situación plantea serios retos para el sistema sanitario, especialmente ante la coexistencia de la gripe y el COVID-19.
Cifras que no cumplen los objetivos
Según los datos de cobertura de Sacyl actualizados hasta mediados de diciembre, la vacunación avanza más lentamente de lo esperado. En los mayores de 60 años, un grupo particularmente vulnerable, el 42% no ha recibido su dosis de la vacuna contra la gripe, a pesar de que han pasado dos meses desde el inicio de la campaña.
Entre los diferentes rangos de edad dentro de este grupo:
- De 60 a 64 años: Solo el 30,5% se ha vacunado.
- De 65 a 69 años: La cobertura alcanza el 50,5%.
- De 70 a 74 años: El porcentaje sube al 60,5%.
- Mayores de 75 años: Falta un 23% por vacunar, aunque ya se registra una cobertura del 77%.
Estos porcentajes están muy por debajo del objetivo del 75% fijado por la Consejería de Sanidad.
Los niños, otro grupo en riesgo
La situación también es preocupante entre los menores de cinco años, con solo un 44,2% de niños vacunados. Esta cifra desciende a un 39,1% entre los niños de 24 a 59 meses y sube ligeramente al 55,6% en los menores de dos años.
Baja vacunación entre profesionales sanitarios
En el ámbito hospitalario, las cifras también son desalentadoras: apenas el 44,7% de los profesionales de hospitales se han vacunado. Aunque estas cifras son superiores a las registradas antes de la pandemia, siguen lejos del objetivo del 75%.
Solo el hospital de Medina del Campo en Valladolid supera esta meta, con un impresionante 91,8% de cobertura. Otros centros, como el Complejo Asistencial de León (31,3%) y el hospital de El Bierzo (24,4%), se quedan muy por debajo.
La vacunación contra el COVID-19 también es insuficiente
La cobertura vacunal frente al COVID-19 también refleja datos preocupantes: solo el 41,6% de los mayores de 60 años han recibido la vacuna, una cifra que podría aumentar la presión sobre el sistema sanitario en caso de coinfecciones.
Por provincias, Soria lidera en vacunación tanto contra la gripe (63,2%) como contra el COVID-19 (48%). En contraste, provincias como León (36,8%) y Ávila (39,2%) presentan las tasas más bajas frente al COVID-19.
