La exposición «Justicia Climática», organizada por Amnistía Internacional, abrió sus puertas este viernes en el Centro Cultural Soledad González. Esta muestra, que estará disponible hasta el 31 de enero, busca sensibilizar a los visitantes sobre el impacto del cambio climático en los derechos humanos. Con paneles informativos, la exposición explica cómo el calentamiento global está afectando a las personas más vulnerables, especialmente en regiones empobrecidas, y cómo la falta de acción de gobiernos y empresas agrava la crisis.
Uno de los temas tratados en la inauguración fue el impacto de la DANA en Valencia el pasado octubre. Francisco Estravis, coordinador de Amnistía Internacional en Zamora, recordó el trágico suceso y afirmó: «Lo que ha sucedido el 29 de octubre en España como consecuencia de la DANA, eso es consecuencia del cambio climático y eso es falta de reconocimiento de los derechos humanos».
Un llamamiento a la reflexión
La alcaldesa de Benavente, Beatriz Asensio, inauguró la muestra junto a la concejala de Cultura, Mercedes Benítez, quien destacó la importancia de que los benaventanos y habitantes de la comarca puedan acceder a esta valiosa reflexión sobre el cambio climático. «Invitar una vez más a que acudan a esta casa, a este centro cultural de Soledad González. Muchas gracias por asistir», comentó Asensio durante su intervención.
Por su parte, Francisco Estravis enfatizó que la exposición está especialmente indicada para que sea visitada por alumnos de la ESO. «Aquí en Benavente y en la comarca también hay algunos institutos con bastante población estudiantil y yo agradecería y recomendaría a los directores y jefes de estudio de esos centros que programen estas tres semanas que en tiempo tienen excursiones o visitas de esos alumnos de esta exposición, que me parece absolutamente educativa y muy necesaria».
Una crisis mundial que no entiende de fronteras
La exposición también invita a reflexionar sobre cómo el cambio climático afecta de manera desigual a diferentes partes del mundo. Estravis recordó que cerca de la cuarta parte de la población de África subsahariana sufrirá las consecuencias del calentamiento global, y se estima que entre 2030 y 2050 más de 400,000 personas morirán prematuramente debido al cambio climático.
A pesar de que España también está experimentando efectos tangibles, como la DANA en Valencia, «lo que sucede en otras partes del mundo es aún más grave. El cambio climático no afecta igual a todos, y las autoridades tienen la responsabilidad de actuar antes de que la situación empeore», concluyó Estravis.
