Numerosos vidrialeses celebraron esta noche la Vigilia Pascual en el santuario de la patrona del Valle de Vidriales. El templo mariano de la Virgen del Campo, en Rosinos, acogió la fiesta litúrgica más importante de la Iglesia, la de la Resurrección. Al grito de: ¡Resucitó, resucitó, resucitó. Aleluya, aleluya, aleluya!, los vidrialeses llegados desde diferentes localidades de la zona participaron en la celebración abierta con el rito del fuego.
El párroco y rector del santuario, Miguel Hernández bendecía a los pies del crucero las llamas con las que se encendería el cirio pascual extendiéndose a las velas de cada uno de los asistentes. Las tinieblas dieron paso a la luz y comenzó la celebración eucarística.