
Este sábado a las 20:00 horas, el Teatro Reina Sofía se llenó de emoción, música y muchas sorpresas. La Banda de Música Maestro Lupi ofreció un concierto de primavera que no dejó a nadie indiferente. Con un programa ambicioso y emocionante, lograron transportar al público a través del tiempo, las culturas y hasta el cine.
Un homenaje muy especial para abrir la noche
Antes de que sonara la primera nota, la banda quiso rendir un emotivo reconocimiento. Invitaron al escenario a Salvador Blanco, padre de dos miembros de la banda. Salvador ha construido un piano artesanal, que hizo su debut oficial en este concierto.
Viajes musicales que ponen los pelos de punta
La primera parte del concierto fue un auténtico viaje sonoro. Cada obra ofrecía una experiencia distinta: nostalgia, tensión, calma… Hubo momentos de oscuridad sonora que parecían sacados del infierno, seguidos de melodías luminosas que nos elevaban al paraíso.
La música nos llevó al Líbano y nos sumergió en paisajes que parecían sacados de un cuento. Todo esto, interpretado con una precisión y emoción que mantuvo al público completamente entregado.
Final de película con Superman
Como broche de oro, la banda interpretó una de las piezas más icónicas del cine: la banda sonora de Superman, compuesta por John Williams. Fue el momento más cinematográfico de la noche, y muchos en el teatro se sintieron, por un instante, como héroes volando entre rascacielos. El sonido épico y envolvente puso al público en pie al final de la actuación.
Una ovación merecida
Con esta mezcla de obras exigentes, emotivas y llenas de carácter, la Banda Maestro Lupi volvió a demostrar su talento y pasión. La ovación fue larga y sentida. Una vez más, la música logró lo que mejor sabe hacer: emocionar, unir y hacer soñar a Benavente.