Castilla y León ha cerrado el tercer trimestre de este año con una deuda de 14.006 millones de euros, un 18,7 por ciento del PIB, lo que supone un descenso, interanual de 1,3 puntos, según los datos del Banco de España publicados este viernes,
Asimismo, la deuda de Castilla y León es 2,6 puntos menos que el 21,3 por ciento de media de las comunidades autónomas, además de que la aportación de la región al endeudamiento global «es reducida» ya que al finalizar el tercer trimestre supone el 4,2 por ciento del total de las comunidades, que suman 333.177 millones de euros.
En términos absolutos, la deuda de Castilla y León al final del tercer trimestre de este años es un 0,25 por ciento inferior a la de hace un año, frente al incremento del 2,36 por ciento experimentado por el endeudamiento del conjunto de comunidades.
En el cálculo del volumen de deuda autonómica el supervisor bancario incluye los créditos reintegrables que la Administración de la Comunidad concede a las empresas, cuantificados en 215,6 millones de euros, así como el llamado ‘factoring sin recurso’, créditos comerciales con la Administración cedidos a entidades financieras, que añade 202,8 millones de euros y también el endeudamiento asociado a proyectos de colaboración público-privada, con 246,1 millones de euros.
Sobre la estructura de la cartera de endeudamiento de Castilla y León en términos del Sistema Europeo de Cuentas (SEC), y según quiénes son los prestamistas, el mayor importe corresponde a las emisiones de deuda pública, ya que supone el 21,1 por ciento, con 2.950 millones de euros.
En segundo lugar, se encuentra el Fondo de Facilidad Financiera con 1.774,2 millones de euros, el 12,7 por ciento, que corresponde a préstamos concertados en los años 2015 y 2020.
Como prestamistas relevantes figuran también las entidades financieras multilaterales, como son el Banco Europeo de Inversiones y el Banco de Desarrollo del Consejo de Europa, con 1.310,2 millones de euros, un 9,3 por ciento de la deuda de la Comunidad.
Según los datos publicados este viernes, el 95,4 del endeudamiento corresponde a la Junta, frente al 4,6 por ciento que es de universidades, organismos autónomos, entes públicos de derecho privado y empresas públicas, entre otros.
En cuanto a los plazos de vencimiento, el 98,5 por ciento de la deuda viva de la Comunidad está formalizada a largo plazo frente al 1,5 por ciento firmada a corto, lo que minimiza los riesgos de refinanciación. Asimismo, el 69,8 por ciento está concertado a tipo de interés fijo y el 30,2 por ciento a variable.
Finalmente, el Banco de España, además, contabiliza en 4.100 millones de euros la deuda de aquellas empresas públicas autonómicas que no están incluidas en el perímetro SEC 2010, sin que Castilla y León tenga asignada ninguna cuantía adicional. De este modo, teniendo en cuenta los datos de todo el sector público autonómico, la ratio media de endeudamiento con respecto a PIB se elevaría al acabar el tercer trimestre de 2024 al 21,6, frente al 18,7 por ciento de Castilla y León.