La CHD refuerza la vigilancia en Zamora ante la crecida del río Tera tras el huracán Kirk

Las lluvias intensas han provocado crecidas en varios ríos de las provincias de Palencia, León y Zamora, mientras los embalses juegan un papel clave en evitar daños.

Aumento de caudales en la cuenca del Duero

La Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) ha intensificado la vigilancia sobre los ríos de la cuenca debido al incremento de caudales causado por las intensas lluvias tras el paso del huracán Kirk. Este fenómeno meteorológico ha afectado especialmente al tercio norte y noroeste de la cuenca, donde en algunas áreas se han registrado precipitaciones de hasta 80 litros por metro cuadrado (l/m2), según informa la CHD en un comunicado reciente.

Superación de los umbrales de aviso en varios ríos

La situación ha provocado que se superen los umbrales de aviso en distintos puntos de control en ríos de las provincias de Palencia, León y Zamora. Los ríos más afectados son el Cardaño, Carrión, Pisuerga, Besande, Resoba, Rivera, Castillería, Monderío y Rubagón en Palencia. En León, los ríos Besandino, Omaña, Porma, Yuso, Cea y Esla también registraron crecidas importantes, mientras que en Zamora, el Tera ha experimentado un notable aumento de caudal.

A pesar de estas crecidas, la previsión es favorable, ya que se espera que los niveles de los ríos comiencen a disminuir en las próximas horas, lo que alivia la preocupación por posibles desbordamientos.

El papel clave de los embalses

Uno de los factores determinantes para evitar inundaciones y minimizar los daños aguas abajo ha sido la gestión de los embalses. En Palencia, los embalses de Compuerto y Camporredondo han sido fundamentales para controlar las avenidas del río Carrión, donde se registraron caudales punta de entrada de más de 200 metros cúbicos por segundo (m3/s).

El embalse de Riaño en el río Esla, con puntas de entrada que superaron los 360 m3/s, y el de Porma, con más de 120 m3/s, también han jugado un papel decisivo en contener el caudal. Por su parte, el embalse de Barrios de Luna en el Órbigo alcanzó puntas de entrada superiores a los 95 m3/s.

Además, en el embalse de Cervera-Ruesga se registró un caudal punta de 63 m3/s, y en el embalse de La Requejada, 84 m3/s, ambos completamente laminados, lo que evitó mayores problemas aguas abajo.

Aumento en las reservas de los embalses

Las intensas lluvias han traído un aspecto positivo: la recuperación de las reservas hídricas en los embalses del norte de la cuenca. Los sistemas de Tuerto (Villameca), Órbigo (Barrios de Luna), Carrión (Compuerto y Camporredondo) y Pisuerga (Cervera, Requejada y Aguilar) han experimentado un notable incremento en sus niveles.

En total, las reservas de agua en la cuenca del Duero han alcanzado los 1.393,1 hectómetros cúbicos (hm3), lo que representa un aumento de 48,6 hm3 en la última semana. Este incremento es una noticia alentadora de cara a garantizar el abastecimiento de agua para la próxima temporada.

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