Castilla y León y Canarias las que más acusan la bajada. Denuncian que la Ley de la Cadena Alimentaria no se está cumpliendo
Unión de Uniones denuncia desde diciembre de 2023 a diciembre 2024 el precio medio estatal pagado al ganadero se ha situado muy por debajo de costes de producción, siendo del 1,542 €/l y suponiendo una bajada del 12,25% respecto al año precedente.
Estos datos, además, están unidos al cese de actividad por parte de los ganaderos, que estarían abandonando por falta de rentabilidad. En este sentido, los datos muestran una tendencia imparable en el cierre de granjas que, de seguir así, dejaría en uno o dos años menos de 2.000 ganaderos de ovino de leche y 3.000 de caprino de leche a nivel estatal.
La organización agraria destaca, además, que la bajada de precios no es igual en todas las CC.AA siendo especialmente altas en Castilla y León, la principal región productora de leche de oveja, y otras como Navarra, País Vasco o Aragón, con descensos importantes también en Canarias.
La Unión de Campesinos UCCL ha llevado a cabo este año cuatro concentraciones en diferentes puntos de la ciudad: Mercadona, la Fábrica de Quesos Entrepinares, la Feria agraria y en la Consejería de Agricultura y Ganadería de Castilla y León, haciendo así un llamamiento a los diferentes sectores de la cadena alimentaria, incluida la administración para denunciar esta situación que está dejando en números rojos a los ganaderos. Desde Unión de Campesinos de Castilla y León UCCL estiman el coste de producción del litro de leche en los 1,4 €/l en esta Comunidad Autónoma, mientras que el precio medio durante 2024 en la CCAA ha sido de 1,36 €/l.
Las movilizaciones, convocadas por esta Organización, continuarán en tanto los ganaderos de ovino no vean satisfechas sus demandas de un precio justo por su producto
Unión de Uniones señala que la situación para la leche de cabra no es más favorable, dejando a los ganaderos en una situación de indefensión, pues no permite tampoco cubrir los costes de producción y con una oleada de cierres en el horizonte.
La Administración, de brazos cruzados
La organización critica que desde la Administración no se está reaccionando en el origen del problema, parcheando después con acciones como campañas de promoción que no repercuten en el bolsillo del ganadero, al contrario, y con las que estarían favoreciendo sólo al resto de los eslabones de la cadena alimentaria.
“Después nos preguntamos por qué no hay relevo generacional”, comentan desde la organización. “Con unas industrias que pagan por debajo del precio de coste que obligan al ganadero a malvivir y no tener ni un céntimo que dé ganancia, ni mucho menos invertir en la mejora de la granja, lo único que podemos esperar es cerrar”, señala José Antonio Martínez, responsable de ovino y caprino de leche de Unión de Uniones.
Unión de Uniones denuncia que la Ley de la Cadena Alimentaria no se está cumpliendo y que no cuenta con las suficientes herramientas para que los ganaderos puedan defender administrativa o judicialmente sus precios y denunciar las prácticas abusivas. Por eso la organización, impulsó una reforma de la Ley cuya tramitación, iniciada hace casi un año, está actualmente siendo bloqueada por la Mesa del Congreso, habiendo sido sometida ya a más de 20 prórrogas del período de enmienda para evitar su debate.
