Los habitantes de Santa Cristina de la Polvorosa se han reunido, un 9 de mayo más, para rendir homenaje al Santísimo Cristo de la Vera Cruz en una de las celebraciones más emotivas y arraigadas de la localidad.
Este jueves, las calles de Santa Cristina se vieron engalanadas para recibir la procesión del Bendito Cristo, una imagen escultórica que ejerce un magnetismo sobre los devotos, atrayendo miradas y corazones al cruzar el umbral de la iglesia local.
Al caer la tarde Santa Cristina desplegó sus mejores galas, pues llegaba el momento más esperado, el desfile procesional en honor al Bendito Cristo de la Vera Cruz. Una comitiva formada por devotos, cofrades, miembros de la corporación municipal y el grupo de mozas del Ramo del Bendito Cristo se congregó frente a la casa del abad, para acompañarlo hasta la iglesia. El camino fue amenizado, un año más, por la charanga benaventana «Los chumachos».
Una vez en el interior del templo, se inició el rezo del Rosario, marcando así el inicio del último día de la novena en honor al Cristo. Las mozas, ataviadas con mantos tradicionales ricamente bordados, protagonizaron un emotivo desfile procesional por el pasillo central de la iglesia, encabezado por el mozo del Ramo.
El canto del Ramo y la bendición del párroco precedieron a la solemne procesión, que culminó con la veneración de la imagen del Bendito Cristo de la Vera Cruz. Aprovechando el buen tiempo se hizo una larga procesión por el pueblo, mientras los fieles se turnaban para cargar a hombros al Cristo.
El ramo, engalanado para la ocasión, lucía las roscas realizadas con esmero por un grupo de jóvenes del pueblo que se reunía el pasado martes en la casa del abad para elaborar estos dulces típicos, que serían subastados al terminar la jornada del jueves.
Santa Cristina de la Polvorosa, fiel a sus tradiciones y devociones, continúa honrando con devoción al Cristo de la Vera Cruz, manteniendo viva una celebración que trasciende el paso del tiempo y que sigue siendo un pilar fundamental en la identidad del pueblo.
