Al ocaso de este lunes 5 de agosto, la imagen de Nuestra Señora la Virgen de las Nieves regresaba a su ermita. Y lo hacía tras la misa de acción de gracias del mediodía y como clausura del novenario en la iglesia parroquial, en el pueblo de San Pedro de Ceque, donde ha permanecido más próxima entre sus devotos. Más cercana físicamente, porque en la devoción la Señora está muy presente entre el vecindario. Por eso, y desde siglos esta festividad del 5 de agosto es la más emotiva.
La celebración religiosa de la tarde del rezo del Rosario y del cántico a la Virgen de las Nieves, presidida por el párroco Miguel Hernández, daba paso a la procesión con la imagen de la Señora.
Centenares de devotos desfilaron con la Señora
Entre abanicos y cánticos emocionados salía a la calle la Virgen de las Nieves, en un desfile procesional hasta la ermita que se alza en las inmediaciones de la carretera de Junquera de Tera, a un kilómetro del casco urbano. Centenares de personas acompañaron a su patrona en una procesión avivada con los ardientes rayos del sol, a su ocaso, pero sin mermar las fuerzas de los devotos. Se cumple así una tradición secular alimentada por los vecinos de San Pedro de Ceque, residentes y descendientes del pueblo que no quieren olvidar sus raices y tradiciones.
Fotos: M.A.C.
