Como manda la tradición, con el chupinazo arrancaban este atardecer las fiestas del Toro Enmaromado en Benavente.
La ciudad es toda ella una fiesta y de ello se encargaron las agrupaciones peñistas en el desfile callejero desde la plaza Mayor.
Numeroso público llenaba las calles del itinerario de la comitiva encabezada por la carroza de las representantes de la infancia y la juventud.