
El puente sobre el río Eria en Villaferrueña estará en obras, previsiblemente el próximo año 2026, debido a una importante intervención en la infraestructura. Técnicos de la Diputación de Zamora, institución propietaria, han valorado la necesidad de actuar ante el deterioro, tras los años, de esta infraestructura viaria que actualmente soporta una relajada circulación rodada sobre la plataforma a raíz de haberse construido una variante de la carretera que rodea al pueblo.
La Diputación tiene previsto intervenir en este centenario viaducto, que el año 2024 cumplía 100 años, con el fin de su reasentamiento de las vigas de hormigón, ya que en su origen fueron calzadas con placas de plomo. Un material ya deteriorado tras más del siglo transcurrido.
Las seis pilastras de este puente, con sus estribos a ambos extremos, sujetan una plataforma viaria que ha tenido ya varias intervenciones de refuerzo puntual, sobre todo en la calzada y en el anclaje del estribo más occidental. Del mismo modo, actuaciones puntuales como la más que demandada valla de protección, tanto para vehículos como peatones, instalada felizmente el pasado 2024.

Descartada la ampliación de la plataforma, prevista hace cinco años
El puente sobre el río Eria que separa dos barrios de Villaferrueña tenía prevista con la anterior presidencia de la Diputación una intervención más ambiciosa, consistente en la ampliación de la plataforma, tal y como se publicó en Benavente Digital. No obstante, a raíz de la merma de circulación rodada, al desviarse ésta por la nueva carretera, a ello sumado los elevados costes, se ha optado por intervenir con el alzado de las vigas con nuevo asentamiento sobre las pilastras, dejando atrás la ampliación.
La memoria técnica de hace cinco años pasaba por paliar el problema de estrechez de este puente que une ambos márgenes del río Eria y comunica los vecinos de una y otra orilla. Más aún, porque el viaducto adolece de la seguridad vial exigida ya que dispone únicamente de un vial de sentido único destinado al tráfico rodado y no posee aceras para el trasiego de peatones. La solución propuesta por parte del Ayuntamiento consistía en la ampliación del tablero con dos aceras de 1,20 metros, ya que de este modo se resolvería la seguridad vial de los peatones como aducían entonces los técnicos. Esta actuación permitiría una plataforma de 6,40 metros. Para ello se tendría que demoler el extremo curvo de las pilas y ampliarlas 1,50 metros anclando las nuevas armaduras a la estructura de hormigón existente en pilas y losas, con taladros y resinas.
El estudio proyectado contemplaba también la colocación de 7 vigas de 1,20 metros de canto y 15 metros de vano colocadas en cada lado del puente y apoyadas en las ampliaciones de las pilas. Sobre las nuevas pilas se construiría una acera corrida en cada lado de 1,20 metros de anchura y 0,20 centímetros de espesor.
Pero, descartada la ampliación se ha optado por un nuevo proyecto que aún está a falta de aprobación y de su posterior remisión al organismo de cuenca, a la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD). Sin embargo, cuenta ya con una partida presupuestaria por una cantidad de 260.154,34 euros, como ha avanzado el presidente de la Diputación Javier Faúndez, presentando el Plan de Inversiones en el Consejo de Alcaldes, como se ha publicado en este medio.
Un puente histórico construido hace 101 años
El puente sobre el río Eria en Villaferrueña era construido entre los años 1923 y 1924, en una época convulsa y de transición entre la monarquía de Alfonso XIII y la dictadura de Miguel Primo de Rivera. La factura de fábrica le pilló a los 533 vecinos en plena crisis social dándose el caso que un alcalde, Miguel Ramos Fernández se encargaba de promover las obras dejando el testigo a su sucesor Sebastián Ramos Ramos quien se hacía cargo del Consistorio el 9 de abril de 1924 a raíz de la destitución dos días antes de la anterior corporación municipal por orden recibida con fecha 7 de abril de 1924 del delegado gubernativo del Partido Judicial de Benavente.
El puente contó con un presupuesto de 101.000 pesetas, de los que 91.000 pesetas salieron de las arcas del Estado y 10.000 pesetas del pueblo. Los vecinos abonaron esta cantidad en dos años respondiendo solidariamente «los diez mayores contribuyentes de Villaferrueña» para que en el caso de impago se pudiera proceder ante los Tribunales de Justicia, según se desprende de la documentación que obra en el archivo municipal, a la que ha tenido acceso Benavente Digital.
