Los vecinos de La Milla de Tera se han «levantado en armas» para defender uno de los emblemas locales merecedores del patrimonio de la intrahistoria, el potro instalado en la calle San Pedro. Las intenciones de su retirada por parte de la alcaldesa, según se anunció en una convulsa sesión plenaria celebrada este viernes en el Ayuntamiento de Vega, no son del agrado del vecindario de La Milla.
La estructura de madera instalada en la calle San Pedro de esta localidad fue un regalo que los vecinos de La Milla hicieron con su pueblo, sustituyendo a una ya muy deteriorada, con el fin de que el potro como patrimonio local permaneciese en el lugar donde siempre había ejercido su labor, la de procurar el herraje de los animales. Los vecinos, a través de la asociación cultural The Briones, a la sazón pionera en la provincia, ya que su constitución data de 1976, instalaron el nuevo potro en el verano del 2021, en las inmediaciones de la que fue antigua posada de arrieros. Un cruce de caminos a donde llegaban los viajeros desde San Pedro de Ceque y en trayecto a tierras carballesas y sanabresas.
Esa casa es precisamente ahora residencia de un vecino madrileño, a la sazón «asesor externo» de la alcaldesa, como así fue presentado en un acto público con motivo de la información vecinal sobre la pretendida construcción de una planta de biogás en Junquera de Tera. Según los convecinos de La Milla, ahora «le molesta que esté ahí ubicado, ya que no puede aparcar como quisiera, y eso que se instaló un poco más arriba para que no le perjudicase a la entrada», advierten algunos de estos vecinos.
Solicitud de declaración BIC ante Patrimonio
El caso es que los vecinos de La Milla de Tera no han dudado en dirigirse a Patrimonio de Castilla y León, a través de la delegación territorial de la Junta, solicitando la declaración de Bien de Interés Cultural para la estructura de madera. Una circunstancia que acarrea la suspensión temporal de cualquier actividad sobre el potro durante al menos tres meses. Desde la propia asociación cultural de La Milla de Tera se ponen ahora a trabajar para sustentar documentalmente la necesidad de que el potro logre la protección de Patrimonio.
En todo caso, la alcaldesa presidenta del Ayuntamiento de Vega de Tera, de cuyo municipio forma parte la localidad de La Milla de Tera, no ha dudado en la sesión plenaria celebrada este viernes en anunciar la retirada del potro, argumentando un informe de un técnico encargado por el Ayuntamiento que, según la alcaldesa, aduce que se halla en un espacio público y debe procederse a su retirada. Esto enerva a los vecinos de La Milla, algunos no quisieron perderse la sesión plenaria, rechazando la medida anunciada por la regidora.
En la sesión, la concejala de Zamora Sí en La Milla adelantaba que se había dirigido un escrito a Patrimonio de Castilla y León solicitando la protección de este patrimonio local de La Milla, como es el potro. La presentación del escrito ante el organismo competente obliga por Ley a demorar las intenciones de la regidora. Los vecinos, al menos, han ganado un tiempo precioso para documentar ante Patrimonio de la Junta la necesaria protección de esta ancestral estructura de madera, aunque se trate de una recreación fiel debido al grave deterioro de la ya desaparecida.
Los vecinos se dirigen al Ayuntamiento rechazando la retirada del potro
Al concluir la sesión plenaria, vecinos de La Milla de Tera registraron un escrito en el Ayuntamiento solicitando que no se retirase el potro de su actual localización en calle San Pedro 37 de esta localidad. En el escrito al que ha tenido acceso Benavente Digital estos vecinos «no entienden la razón de porqué se debe retirar después de tres años de haberlo colocado. Ya que no hubo oposición por parte del ayuntamiento entonces y este no ha causado ningún daño ni contratiempo a los vecinos. La razón de colocarlo en el lugar exacto donde estaba el antiguo, aparte de ser simbólica, también fue práctica, ya que se encuentra a un lado de la calle/plaza y no imposibilita el tránsito, así como ocurría con el antiguo».
Argumentan también que «el actual potro de la Milla se sitúa en el mismo lugar donde estuvo el antiguo potro durante muchos años antes, y que por causa de la erosión y la pavimentación de la calle se tuvo que retirar, sustituyéndolo por una nueva estructura de madera similar. Dicho potro a día de hoy es un homenaje al antiguo potro y forma parte del patrimonio cultural del pueblo. Ha sido construido por los vecinos del pueblo y quiere simbolizar lo que vivió La Milla muchos años antes, en sus labores de campo y de sus gentes que lo usaron. Así se le comunicó al ayuntamiento hace tres años cuando se instaló, y no hubo ningún problema al respecto», explican.
El caso es que este domingo, a las puertas de la iglesia, se celebrará un concejo para que los vecinos se pronuncien al respecto y como indican en el escrito presentado en el Ayuntamiento «si al finalizar la resolución de la causa del potro de La Milla, se concluye en su retirada, los vecinos que lo construyeron e instalaron piden que el Ayuntamiento lo traslade a otra zona pública del pueblo sin causar daño alguno al potro. Se construyó con mucho esfuerzo de los vecinos y se solicita respeto a este trabajo y labor».