Respuesta firme a las críticas del Consejo de Médicos
El Colegio de Enfermería de Zamora, en conjunto con el Consejo de Colegios de Enfermería de Castilla y León y el sindicato de Enfermería SATSE, ha expresado su total desacuerdo con las afirmaciones hechas por el Consejo de Colegios Oficiales de Médicos de Castilla y León (CCOMCYL) sobre la capacidad de las enfermeras para prescribir ciertos medicamentos. Según las organizaciones de Enfermería, la prescripción enfermera es una práctica esencial que mejora la calidad y eficiencia del sistema sanitario en la comunidad.
En un comunicado emitido el 29 de agosto, el CCOMCYL rechazó la posibilidad de que las enfermeras puedan prescribir medicamentos, una postura que ha sido fuertemente contestada por el sector de Enfermería. Patricia Miguel, presidenta del Colegio de Enfermería de Zamora, afirmó que «la prescripción enfermera va en beneficio del paciente y agiliza la atención sanitaria».
Beneficios claros para el paciente
Los representantes de Enfermería han subrayado que la prescripción enfermera no invade competencias médicas, sino que actúa dentro del marco legal y profesional establecido. Las guías que regulan esta práctica han sido desarrolladas con la colaboración de médicos, enfermeras y farmacéuticos, lo que garantiza su rigor científico.
Enrique Ruiz Forner, presidente del Consejo de Colegios de Enfermería de Castilla y León, y Mercedes Gago López, Secretaria General Autonómica de SATSE, destacaron que «la prescripción enfermera no solo mejora la agilidad en la atención al paciente, sino que también refuerza la seguridad en el proceso del cuidado». Añadieron que los enfermeros son profesionales altamente cualificados que pueden ofrecer respuestas rápidas y efectivas en situaciones que no requieren la intervención directa de un médico.
Optimización del sistema sanitario
Además de mejorar la atención al paciente, la prescripción enfermera contribuye a la optimización de los recursos del sistema sanitario. Permite una mayor accesibilidad a los tratamientos necesarios y reduce la carga de trabajo en los médicos de Atención Primaria. Esta práctica es común en otros países europeos y ha demostrado ser beneficiosa tanto para los pacientes como para los profesionales sanitarios.
Las enfermeras reciben formación en farmacología durante su Grado, lo que les proporciona los conocimientos necesarios para manejar los medicamentos de manera segura y efectiva.
Un llamado al diálogo y la colaboración
El Colegio de Enfermería de Castilla y León y SATSE han reiterado su compromiso de colaborar con todos los profesionales del ámbito sanitario para asegurar la mejor atención posible a los ciudadanos. «La colaboración entre médicos y enfermeros es fundamental para garantizar una atención integral y de calidad a los pacientes», afirman Ruiz Forner y Gago López.
En este sentido, instan a la Consejería de Sanidad a seguir respaldando las guías de prescripción enfermera y fomentando un diálogo constructivo entre todos los actores implicados. «Es necesario avanzar juntos en la mejora continua de nuestra sanidad, siempre con el paciente en el centro de nuestras actuaciones», concluyen.
