
El exjugador del FC Barcelona, Dani Alves, ha sido absuelto por el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) tras la revocación de su sentencia por agresión sexual. La decisión se tomó por unanimidad, y el tribunal concluyó que había «déficits valorativos» en la sentencia original que no permitían sostener la condena.
El futbolista brasileño fue condenado en febrero de 2024 a cuatro años de prisión por la agresión sexual a una joven de 23 años en la discoteca Sutton de Barcelona, en la noche del 31 de diciembre de 2022. Sin embargo, el TSJC considera que las pruebas presentadas no cumplen con los estándares necesarios para probar la culpabilidad más allá de la duda razonable. Citando que las “insuficiencias probatorias” llevaron a la revocación de la sentencia.
En el fallo del tribunal se señala que, a pesar de no acreditar completamente la versión del acusado, las pruebas presentadas en el juicio no fueron suficientes para superar los requisitos legales de la presunción de inocencia. Por ello, el tribunal ha emitido una resolución absolutoria y ha dejado sin efecto las medidas cautelares que habían sido adoptadas, como la prisión preventiva que mantuvo a Alves detenido durante 14 meses.
«Se ha hecho justicia», afirma la defensa
La abogada de Dani Alves, Inés Guardiola, expresó su satisfacción con el fallo, manifestando en una entrevista en RAC1: “Estamos muy felices, se ha hecho justicia, se ha demostrado que Alves es inocente”. La defensa había argumentado que las pruebas no respaldaban las acusaciones de la joven. Además, el tribunal ha determinado que no se alcanzaron los estándares necesarios para una condena.
Alves, quien estuvo encarcelado preventivamente durante más de un año, fue liberado en marzo de 2024 tras pagar una fianza de un millón de euros. La Audiencia de Barcelona consideró que, aunque el riesgo de fuga no había desaparecido por completo. Si no que había disminuido lo suficiente como para conceder su libertad provisional.
Este veredicto es un giro significativo en el caso que captó la atención internacional y abre la puerta para que Alves recupere su vida y posiblemente su carrera futbolística. La sentencia revocada había sido mucho más benévola de lo que solicitaban las acusaciones, que pedían penas de hasta 12 años.