El grupo vallisoletano Celtas Cortos ha escogido este miércoles, 20 de enero, día de la salida del 45º presidente de los EEUU, Donald Trump, de la Casa Blanca, para despedir al político que ha hecho «de su capa un sayo». Por tanto, «no ha sido un día aleatorio o random», ha aclarado el cantante de la banda, Jesús Cifuentes ‘Cifu’, sino que se trataba de una fecha premeditada para el lanzamiento del nuevo tema y que da el pistoletazo de salida al un proyecto de lanzar un nuevo tema cada cinco semanas.
Así lo ha indicado este miércoles durante la presentación del sencillo en el Teatro Cervantes de la capital vallisoletana, donde también se ha proyectado el videoclip que acompaña al mismo, en el que se incluyen imágenes del asalto al capitolio por parte de seguidores de Trump el pasado 6 de enero.
«Después del asalto, pensé en la previa impagable que le estaban haciendo al single, que ya teníamos preparado para la salida de Trump», ha reconocido Cifuentes en declaraciones recogidas por Europa Press durante la presentación del tema, que según ha explicado, parte de una concepción íntegramente instrumental y con un sonido «muy Misisipi», a la que decidieron, finalmente, dotar de letra.
Con peinetas incluidas al presidente saliente, Celtas Cortos, conscientes de que una letra tan explícita puede hacer que «alguno se lleve las manos a la cabeza», consideran que también «resulta muy terapéutico soltar un exabrupto de vez en cuando».
Además, según ha matizado ‘Cifu’, las críticas de la canción, aunque dedicadas de forma expresa a Trump, también pueden extrapolarse al ámbito nacional: «Es reflejo de lo que dijo Iñaki Gabolondo, que abandonaba sus mañanas ante el hartazgo y el empacho de la bravuconada política».
«Estamos todos cansados de la mala gestión», ha afirmado el cantante de Celtas Cortos, sobre todo en unos «días duros para la población» que han dejado entrever que «bajo la punta del iceberg de la emergencia sanitaria del Covid hay mucha basura», ha aseverado.
En este sentido, ha hecho referencia a «todo lo que hay detrás del sufrimiento de la población civil»: el coronavirus, Cañada Real, ‘Filomena’, la subida del precio de la luz, las hipotecas o los desahucios. «Es un disparo de cabreo», ha zanjado.
Sin embargo, también ha matizado que detrás de los sentimientos de rabia, furia e indignación, siempre hay sitio para una inyección de energía positiva: «La vida tiene muchos formatos que nosotros pasamos por el tamiz de nuestro corazón».
Por ello, ha avanzado que el contenido de los próximos trabajos, más allá de la crítica social de este primer single, será «muy diverso» y atenderá a un «abanico muy amplio» de temas.
Todo en un año que se antoja «muy diferente» dada la ausencia de actuaciones y el «abandono de la cultura», pero «las inquietudes siguen ahí» y, según han afirmado ellos mismos, si hay algo que no les pueden quitar el es «la creación».