Abascal pone en jaque a Mañueco: Vox exige cambios en la política migratoria para apoyar los presupuestos de 2025
El presidente de Vox, Santiago Abascal, ha lanzado un ultimátum al presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco. Durante una rueda de prensa celebrada este lunes, Abascal dejó claro que su partido no respaldará los presupuestos autonómicos de 2025 a menos que el Partido Popular (PP) realice un cambio «radical» en su política migratoria. Esta declaración llega en un momento crucial, ya que Mañueco había manifestado previamente su intención de presentar las cuentas «en tiempo y forma» el próximo 15 de octubre.
Un mensaje contundente para el PP
«Los presupuestos antes de apoyarlos hay que leerlos, y lo que tendríamos que saber es si el PP ha aprendido la lección y está dispuesto a cambiar radicalmente sus posiciones en política migratoria y de reparto de inseguridad por todo el territorio nacional», afirmó Abascal. Con estas palabras, el líder de Vox dejó claro que su apoyo no está garantizado y que los populares podrían verse obligados a negociar con el PSOE si no ceden en este aspecto.
Vox se mantiene firme en sus principios
Abascal fue tajante al afirmar que, si el PP no cambia su postura en relación con la inmigración, «tendrán que llamar al PSOE y llegar a un acuerdo con aquellos con los que comparten todas las agendas», refiriéndose a la agenda migratoria, la Agenda 2030 y la agenda de género. Estas son cuestiones que Vox considera «troncales» y no está dispuesto a negociar.
El contexto de estas declaraciones no es fortuito. Solo una semana antes, el portavoz de Vox y exvicepresidente de la Junta, Juan García-Gallardo, ya había anticipado que vincularía el apoyo de su partido en las Cortes de Castilla y León a un cambio en las políticas migratorias del PP. Gallardo exigió medidas contundentes contra la inmigración ilegal y masiva como condición para un hipotético voto afirmativo a los presupuestos.
La situación política en Castilla y León
La advertencia de Abascal llega en un momento en el que Mañueco se enfrenta a una situación delicada. Tras la salida de Vox del Ejecutivo autonómico, el PP se encuentra en minoría parlamentaria, lo que dificulta la aprobación de las cuentas públicas sin el apoyo de otros grupos políticos. Mañueco había anunciado una ronda de reuniones con los distintos grupos parlamentarios para intentar conseguir los acuerdos necesarios, pero la postura firme de Vox podría complicar significativamente este proceso.
El 15 de octubre será una fecha clave para la política en Castilla y León, ya que es el plazo límite para la presentación de los presupuestos en las Cortes. Sin el apoyo de Vox, Mañueco podría verse obligado a buscar el respaldo del PSOE, lo que implicaría una alianza inesperada y complicada de gestionar.
